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El ISCIII financia un proyecto de IrsiCaixa para estudiar la inmunidad a largo plazo contra el SARS-CoV-2 y aplicarla a futuras vacunas

Los investigadores estudiarán la inmunidad contra el coronavirus generada por los linfocitos T, que confieren protección prolongada | Realizarán un screening de personas con infección temprana y hasta un año después, para realizar el seguimiento de cómo y cuándo cambia la respuesta inmunitaria

El Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) financiará, a través del Fondo COVID19, un proyecto de IrsiCaixa para estudiar la respuesta inmunológica a largo plazo contra el coronavirus SARS-CoV-2 y poder aplicar la información a futuros prototipos de vacuna contra el virus. El estudio, uno de los 37 aprobados por el ISCIII esta semana, está liderado por IrsiCaixa y cuenta con la colaboración del Hospital Universitario Germans Trias i Pujol y el IDIAP JGol. De los 1.400 proyectos presentados ante el ISCIII, el Fondo COVID19 ha seleccionado hasta el momento 117.

El origen del proyecto se basa en el desconocimiento existente sobre la respuesta inmunológica de memoria frente al SARS-CoV-2. Esta falta de información es debida a los pocos casos que se pudieron estudiar durante el brote de SARS del 2002-2003 y a la escasez de datos científicos sólidos evaluados en humanos. “A pesar de que los anticuerpos frente la proteína Spike del virus protegen, esta protección es limitada en el tiempo, se asocia a la cantidad de anticuerpos en circulación y sólo protege frente a variantes concretas –explica la IP del proyecto, Julia García Prado, investigadora de IrsiCaixa y directora científica del Instituto de Investigación Germans Trias i Pujol–. Por eso nos centraremos en el estudio de los linfocitos T, que pueden circular durante meses o años y que son esenciales para la protección a largo plazo de la población”, continúa.

Para ello, el proyecto analizará la respuesta inmunológica de células T en personas expuestas al virus pero que no han sufrido la infección o que la han cursado de manera asintomática, y la comparará con la de aquellas que han cursado la infección sintomática en diversos grados. “Haremos un screening de muestras de personas con infección temprana y hasta un año después, para poder hacer seguimiento de cómo y cuándo cambia la respuesta inmunitaria”, especifica García Prado.

 

Segunda generación de vacunas

El objetivo final es identificar qué regiones del virus generan una respuesta por parte de los linfocitos T. “Estos datos establecerán la base racional para el diseño de un prototipo de vacuna T en una segunda fase, que permita la protección poblacional a largo plazo”, indica Christian Brander, investigador ICREA en IrsiCaixa cuyo grupo, que tiene amplia experiencia en el desarrollo de vacunas T, colabora en el proyecto. “Partimos de la ventaja de tener una larga experiencia en inmunología de células T frente a virus como el VIH, el de Epstein-Barr o el de la Hepatitis C, y en el desarrollo de prototipos de vacunas frente al VIH. Esto nos garantiza una rápida implementación metodológica, porque ya tenemos la infraestructura y recursos disponibles, y nos permitirá acelerar el estudio de la inmunidad protectora frente a SARS-CoV-2”, señala Brander.

El estudio también contempla determinar el periodo necesario para la generación de inmunidad protectora y desarrollar una metodología que permita la evaluación de la inmunogenicidad de vacunas T, tanto del prototipo que se desarrolle en IrsiCaixa como de los de otros centros.

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